El post de hoy lo queremos dedicar a un tema de actualidad colegial que nos nos debería ser indiferente debido a su importancia. Nos encontramos hoy día ante un panorama en el que el acoso escolar es cada vez más frecuente en el ámbito educativo de nuestro país. Todas las actuaciones dirigidas a crear un clima positivo de centro, que conviertan el centro educativo en un lugar de convivencia son acciones preventivas del acoso escolar que además favorecen el aprendizaje y el crecimiento personal del alumnado. En este sentido y ante la gravedad de la cuestión en el sentido que implica a nuestros hijos queremos hablar del uniforme colegial como herramienta para favorecer la convivencia en el centro escolar y definir un clima idóneo para la escuela.
En primer lugar, es de sobras sabido que los uniformes promueven la disciplina en el colegio, Son muchas las voces que claman, entre ellas las de profesores y padres,que el uso de uniformes en el colegio promueve la disciplina. El sólo hecho de que los niños lleven puesto un uniforme implica que deben acatar unas normas determinadas. Este aspecto se convierte en un recordatorio visual para que los alumnos sigan unas determinadas normas en el colegio.
En segundo lugar, en los colegios en los que hay uniformes escolares hay menor discriminación y menor presión social entre niños. Aunque a la mayoría de los niños les gustaría llevar ropa de marca o de la última moda, no todos los padres pueden comprarla. Para aquellos niños que no pueden comprar este tipo de ropa, esto puede suponerles un punto de diferenciación frente a sus compañeros y conducirles al acoso y estrés emocional. El uniforme se presenta como herramienta para favorecer la igualdad y equidad en el centro. Cuando los niños van al colegio con uniforme, todos son iguales; todos llevan los mismos pantalones, falda, la misma camisa, zapatos similares, etc… Ello evita las comparativas y las presiones sociales a muchos de ellos que no se ven forzados a tener que comprar determinadas prendas de ropa para sentirse parte de un grupo determinado. Este aspecto es muy importante ya que puede tener un impacto considerable en el concepto que el niño tiene de sí mismo.
Cabe señalar también que el uso de los uniformes en ningún caso marca la vida de la mayoría de los niños. Aunque a muchos no les gustan, terminan acostumbrándose a llevar un uniforme. Para los padres supone un ahorro económico considerable y la desaparición de una fuente de discusiones a la hora de elegir la vestimenta para acudir al centro. En este mismo sentido, el uniforme escolar evita que profesores y administradores del colegio tengan que comportarse como policías con los alumnos, diciéndoles la ropa que pueden y no pueden llevar al centro. En aquellos colegios en los que no hay obligación de uniforme escolar, los niños visten con ropa que no es del todo apropiada para llevar al colegio. Esto se traduce en que los profesores a menudo tienen que discutir y enfrentarse con alumnos y padres por llevar una indumentaria inadecuada.
Por otro lado, el uniforme colegial ayuda a los niños a sentirse más identificados con el colegio y se fomenta el sentido de pertenencia del niño al centro, identificándose con una imagen y asimilando unas normas que acatar. Algunos profesores aseguran que los niños que usan el uniforme toman más en serio al colegio, les ayudan a mantener la disciplina y a respetar las reglas escolares. El uniforme no sólo unifica sino también da una cierta identidad a los niños.
En último lugar, por razones evidentes, el uniforme hace que sea más fácil para las autoridades escolares reconocer a aquellos estudiantes que pertenecen a su escuela y aquellos que no pertenecen. También dificultan que aquellos que no pertenecen a esa escuela, entren en el colegio sin permiso. Para hacerlo y pasar desapercibidos, deberían comprarse y vestirse con el uniforme del colegio, lo cual lo hace más difícil. Una ventaja añadida de gran importancia, es que les hace sentir más agrupados y más fáciles de identificar por los maestros cuando hacen alguna salida (excursiones, ida al teatro…) del colegio, evitándose así posibles perdidas o la aparición de intrusos indeseables.
Aparte de las ventajas ya comentadas, desde Ayapunt confiamos firmemente en la cualidades del uniforme como una importante vía para evitar las diferencias en el colegio. El uniforme les hace más iguales, evita a que algunos se sientan inferiores o menos valorados que otros e incluso reduce las burlas y conflictos entre los alumnos.
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